Cuando el cliente nos visitó informándonos de forma detallada la situación del negocio, le propusimos un enorme cambio de identidad hasta entonces inexistente.
Partimos estudiando el negocio ( reuniones, asesoramiento, visita de establecimientos, reportajes fotográficos, toma de medidas y presentación de posibles estilos).
Creación del logotipo, este debía de adoptar un estilo americano (pizza de base americana) y tras escuchar los gustos de los clientes lo enfocamos con un toque vintage.
Una vez creado el logo, este fué aplicado a motocicletas, pequeños adhesivos de todo tipo, ropa laboral, packaging, rótulos luminosos y vinilos decorativos.
Tras medir los locales presentamos un estilo vintage muy desenfadado enfocado a un público dinámico y joven, estos locales irían rotulados con enorme cantidad de vinilos (opacos impresos, laminados de suelos, efecto ácido impreso, transparentes impresos....) y gran cantidad de imágenes de altas resoluciones muy tratadas creando "un todo" de estilo inconfundible, el objetivo era llamar la atención con formas impactantes y mantener al joven público felizmente distraido en los comedores.
Asesoramos en el cambio interior, selección de colores y objetivos de la obra, nuestras limitaciones para el gran cambio fué disponer en paredes desde el zócalo hasta el techo.
En interiores provechamos los muebles rotulando las mesas con divertidos diseños, suponiendo un gran ahorro para el cliente y en la fachada se optó por pegar vinilo especial de fachada para evitar obra y con la idea de cambiar el diseño pasado un tiempo pegando vinilo sobre vinilo.
Finalizamos el trabajo de imagen creando una web con compra online y un posicionamiento, llevando al cliente a primer puesto en Google a nivel provincial durante el periodo de contratación de este servicio.